La Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) ha tomado la decisión histórica de eliminar la denominada ‘Preocupación significativa de seguridad operacional’ en la aviación mexicana, tras el cumplimiento total de las autoridades mexicanas a una exhaustiva auditoría practicada a la Agencia Federal de Aviación Civil (Afac), según informó la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) del Gobierno mexicano en un comunicado.

Este hito se ha alcanzado un mes antes de la fecha límite establecida por la OACI, que originalmente estaba programada para el próximo 8 de julio.

En mayo, la OACI había emitido una advertencia señalando que la aviación mexicana aún no había subsanado algunas observaciones de seguridad, lo que desencadenó una auditoría integral debido a discrepancias con el Convenio de Chicago, especialmente en aspectos relacionados con los servicios de navegación, verificación e inspección, entre otros.

Esta situación generó preocupación en el sector, ya que existía el riesgo de que México volviera a perder la categoría 1 en materia de seguridad aérea, la cual había recuperado recién en septiembre de 2023.

Recordemos que en mayo de 2021, la Administración Federal de Aviación de los Estados Unidos degradó a la aviación mexicana a la categoría 2, lo que significó una restricción para abrir nuevas rutas hacia Estados Unidos, su principal socio comercial, durante más de dos años.

La Afac destacó que el mes pasado concluyó el programa de verificación que incluyó la revisión y calibración de 95 radioayudas en 74 estaciones, en relación con la vigilancia de los servicios de navegación aérea en el espacio aéreo mexicano. Además, señaló que «Servicios a la Navegación en el Espacio Aéreo Mexicano (Seneam) realizó mediciones y estadísticas periódicas que permiten confirmar que los sistemas de radioayudas a la navegación se encuentran dentro de las tolerancias en los diferentes aeropuertos».

La Afac subrayó que esta acción brinda certeza operacional en el espacio aéreo mexicano y enfatizó que «no se han generado quejas por los usuarios finales, sobre desviaciones de rumbo o errores de marcación en los sistemas».

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